miércoles, 14 de marzo de 2012

Luces de la gran ciudad...

Hoy he ido a recoger a mi compadre, Tiberio, a la estación de tren de Málaga, que en realidad, es un gran centro comercial. Mientras esperaba, me ha dado por pasear por su interior. Y las luces, el bullicio de la gente y trajín de personas con excesiva prisa y mal humor, ha hecho que empezase a angustiarme. Tan solo llevo 11 días al margen de la sociedad. Sin espejo, ni mi ropa. Sin personas a mi alrededor. Es extraño, pero veo el mundo diferente, como si no perteneciese a él. Sé que por desgracia, seguramente, vuelva a acostumbrarme a las luces y al ruido de la gran ciudad. Aunque en el fondo me he sentido un privilegiado, sabedor, de que en varios minutos volveré a escapar de ella. A un mundo que ya probé, y que pruebo, cada año, en mis habituales escapadas. Un mundo en el que yo, soy yo. Donde me encuentro, donde puedo ser objetivo, donde nada ni nadie me hace mal...

Después de recoger a Nico, mi compañero de viaje, nos hemos apresurado en busca de nuestra calabaza (la caravana donde dormimos) ,donde casi sin luz, puedo volver a mi paz. Solo pensar, en como y por donde, voy a atravesar este entramado de autovías y destrozo urbanístico que atraviesan la costa del sol. Difícil misión...

Mañana 10 kilómetros corriendo, 48 en bici y 3 en monopatín con el objetivo de pasar el fin de semana en Tarifa (Cádiz). Si así fuese, el siguiente fin de semana seria el último de esta, tan gratificante aventura.

Hoy hemos estrenado el final del primer capítulo de EL RETO una huída hacia adelante y pido disculpas a los seguidores por tan brusco final. Hemos tenido un problema con el servidor donde enlaza nuestra web, espero que en breve esté subsanado. www.elretoadelante.com