En páginas anteriores habréis comprobado mi devoción por el autor Ruyard Kipling. Pues hoy os regalo una maravillosa traducción que he robado del blog (por esos andurriales) de otro gran autor y amigo. José Miguel Ridao. Economista, profesor, poeta, y autor de varios libros como: Administración de empresas en diez capítulos, economía en diez capítulos, bloqueína, economía de la empresa. Gracias por dar tu toque a un inmenso poema.
Si puedes serenarte cuando todos
se están volviendo locos y te culpan;
Si puedes creer en ti cuando otros dudan
Pero también albergas dudas;
Si puedes esperar, y no te cansas
O, si te mienten no dices mentiras
O, si te odian, no te ciega el odio,
Y no eres ni muy bueno ni muy sabio,
Si cuando sueñas no te atrapa el sueño,
Si no te pierdes en tus pensamientos;
Si al encontrar el triunfo o el desastre
Los tratas por igual como impostores;
Si puedes tolerar que tus verdades
Se conviertan en trampa de estúpido;
O ver caer las torres que erigiste
Y rehacerlas con tus propias manos.
Si puedes coger toda su fortuna
Y arriesgarla a un giro de ruleta,
Y perder y empezar desde el principio,
Y no quejarte nunca de tu pérdida;
Si puedes hacer que tu corazón
Te conduzca después de que haya muerto
Y aguantes aunque ya nada te quede
Salvo tu voluntad que grita… ¡sigue!
Si cuando hablas con el pueblo sigues limpio
Y no te engríes al tratar con reyes;
Si ni amigos ni enemigos te hieren;
Si todos te respetan sin excesos;
Si puedes rellenar el tiempo implacable
Con un esfuerzo que valió la pena,
Tuya es la tierra y todo lo que guarda,
y- aun más- serás un hombre, hijo mío.
2 comentarios:
Gracias a ti, Julio, por mostrarlo en tu ventana. Es un honor para mí.
Llevaba un tiempo buscando tu blog, y al final lo he encontrado gracias a Mr. Google.
Un fuerte abrazo.
El honor es mio por haberte conocido.
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